La selección Sub-20 de Marruecos protagonizó una de las mayores sorpresas en la historia del fútbol juvenil al vencer a la poderosa Argentina en la final de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Chile 2025, disputada en el Estadio Nacional Julio Martínez Prádanos.
Foto: FIFA
El triunfo convierte al conjunto dirigido por Mohamed Ouahbi en el segundo equipo africano que levanta este trofeo, después de Ghana, que lo consiguió en 2009. La gran figura de la noche fue Yassir Zabiri, autor de los dos goles con los que los “Cachorros del Atlas” sellaron una gesta memorable.
Argentina llegaba como amplia favorita. Había ganado seis títulos mundiales en la categoría y solo había perdido una final. Además, llegaba invicta con seis victorias, 15 goles a favor y apenas dos en contra, mientras que Marruecos debutaba en esta instancia tras una campaña irregular en la que incluso cayó ante México.
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Sin embargo, desde los primeros minutos, el partido tomó un rumbo inesperado. Zabiri, con velocidad y determinación, desbordó hacia el arco rival, superó a Santino Barbi y fue derribado por el portero argentino. Aunque el VAR determinó tiro libre en lugar de penalti, el marroquí se encargó de transformar la jugada en magia: ejecutó el cobro con maestría y clavó el balón en el ángulo superior, firmando el 1-0.
Lejos de replegarse, Marruecos aprovechó los espacios que dejaba la Albiceleste. En una rápida transición, Ismael Baouf robó el balón y asistió a Othmane Maamma, quien centró para que Zabiri, de volea, marcara el segundo gol y desatara la euforia del banquillo africano.
Argentina intentó reaccionar. Mateo Silvetti estuvo cerca de descontar antes del descanso, mientras que Maamma casi sentencia con otro disparo que fue despejado in extremis por Juan Villalba.
En la segunda mitad, el conjunto de Diego Placente monopolizó la posesión y buscó el descuento con Ian Subiabre y Gianluca Prestianni, pero la sólida defensa marroquí, liderada por Baouf y Fouad Zahouani, cerró todos los caminos hacia el arco de Ibrahim Gomis.
Cuando el árbitro señaló el final, el estadio estalló. Marruecos había hecho historia: 48 años después de su primera participación en un Mundial Sub-20, alcanzó la gloria máxima y demostró que el fútbol africano sigue escribiendo páginas doradas en los torneos de la FIFA.
La hazaña de los “Cachorros del Atlas” marca un antes y un después para Marruecos, un país que sigue sorprendiendo al mundo con su crecimiento futbolístico, consolidando su lugar entre las nuevas potencias del balompié mundial.
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