La Defensoría del Pueblo expresó su rechazo a las declaraciones del alcalde de Pitalito, Yider Lina, quien durante un acto público afirmó que “si hay que apretar el gatillo ante la delincuencia, hay que hacerlo. Aquí no vamos a ser tolerantes: o en la cárcel o en el cementerio”.
El organismo defensor de los derechos humanos recordó que la pena de muerte está prohibida en Colombia, y advirtió que este tipo de afirmaciones incitan a la violencia y la legitiman, dejando de lado las vías constitucionales y el uso regulado de la fuerza.
“La situación de derechos humanos que enfrenta el municipio de Pitalito exige la adopción de medidas urgentes que permitan garantizar el derecho a la vida y la integridad de sus habitantes”, señaló la Defensoría en un comunicado.
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El ente también manifestó su respaldo a la Personería Municipal de Pitalito, que pidió a las autoridades locales mantener sus pronunciamientos y actuaciones dentro del marco del respeto a las garantías constitucionales y los derechos de toda la ciudadanía.
Así mismo, la Defensoría llamó a las entidades del Estado responsables de la investigación, captura y judicialización de presuntos delincuentes a fortalecer su accionar dentro del respeto irrestricto a los derechos humanos, subrayando que la justicia no puede operar mediante la violencia ni los discursos de odio.
Finalmente, la entidad recordó que los agentes del Ministerio Público tienen el deber constitucional de difundir, promover y proteger los derechos humanos, y que sus llamados respetuosos no deben generar reacciones que promuevan discursos violentos o de intolerancia contra quienes ejercen sus funciones de control.
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