Como estaba previsto, la Jueza 44 del Circuito de Bogotá, Sandra Liliana Heredia, condenó a doce años por el soborno en actuación penal y fraude procesal, al expresidente Álvaro Uribe Vélez, para lo cual le impuso la pena en prisión domiciliaria. El Tribunal Superior de Bogotá tendrá un plazo hasta el 13 de agosto a las 5 PM para dirimir dicha apelación. El 14 de octubre de 2025 es la fecha, para evitar la prescripción de este fallo. La sentencia de primera instancia debe cumplirse de inmediato, y ordenó a las autoridades el traslado de Uribe Vélez a su lugar de domicilio. Asimismo, se activó al Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) para que, en lo de su competencia, registre al líder natural del Centro Democrático y lo tenga en cuenta como sujeto privado de la libertad. Lo absurdo, es que ordenó su inmediata detención. De acuerdo con expertos, que se puede inferir que se nota un sesgo ideológico, donde la justicia se ha politizado.
Inmediatamente, luego de la lectura de la sentencia, inmediatamente se generaron controvertidas opiniones a favor y en contra de éste. A nivel nacional e internacional se escucharon a través de los medios de comunicación y las redes sociales las expresiones de respaldo unánime hacia el expresidente Uribe. Queremos destacar la extraordinaria sustentación oral para apelar este fallo. Realizó un detallado relato sobre cada uno de los acápites que desvirtuaron cada una de las acusaciones que realizó y que sirvieron de soportes para determinar este fallo judicial, que es considerado político, por el mismo condenado en su exposición. Este juicio es considerado histórico para el país, porque es la primera vez que un exjefe de Estado de Colombia es condenado por estos delitos en mención.
Respetuosamente queremos desde esta tribuna de opinión, hacer un análisis sobre las eventuales consecuencias que se pueden generar, producto de fallo. Lo hacemos desprevenidamente. Actualmente tenemos una geopolítica nueva desde el pasado 20 de enero cuando se posesionó Donald Trump como presidente de los Estados Unidos. Esta situación es desconocida por la opinión pública nacional. Pero puede suceder. Alvaro Uribe Vélez ha sido la persona aliada con el país del Tío Sam, en la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico donde Colombia ha sido es el mayor productor de Cocaína y exportador hacia el país del norte. Los recientes hechos acaecidos recientemente en el país vecino de Brasil, donde la justicia condenó al expresidente Bolsonaro, que es también aliado del país más grande del planeta. Resultado, el presidente Trump le impuso aranceles del 50% a todas las exportaciones de Brasil hacia los Estados Unidos y sanciones al Juez que promulgó dicha sentencia. Esperamos que no vaya a suceder este suceso, porque sería la más grande hecatombe para la economía colombiana y para la sociedad.
