Alfonso Vélez Jaramillo
Si me preguntan si vivo feliz en Neiva, de manera categórica y rotunda digo que sí. Pertinente y puntual aclarar que la felicidad es de carácter subjetiva, cada cual la observa y la concibe de acuerdo con su interés personal, económico y social.
Para algunos la felicidad coexiste en una ciudad perfecta, al estilo y los servicios de las mejores del mundo, con adelantos tecnológicos, tradición histórica y cultural, poder adquisitivo de quienes la habitan, en las que no hay necesidades básicas insatisfechas y a nadie le falta nada y les sobra solidaridad.
En esos conglomerados todos trabajan de manera responsable, la gente es consciente de su compromiso, hay cultura ciudadana y respeto por los derechos de sus vecinos, reverencian las normas y, con mayor razón, acatan a las autoridades y el orden jurídico.
Aquí es muy difícil, hay quienes no respetan ni a los uniformados, pese a todo, hemos evolucionado, aunque Colombia sigue siendo un país en pleno desarrollo humano, social y cultural.
Difícil expresar que una ciudad es mejor que otra. En todas cosas hay buenas y malas, unas tienen problemas, y el mayor flagelo hoy día es la inseguridad y la falta de oportunidades.
Despojado de cualquier interés personal, vale la pena destacar a la alcaldía de Neiva por haber sido ranqueada entre las 7 mejores del país, según el Índice de Desempeño Institucional, (IDI) 2024.
Esta calificación genera confianza en su alcalde German Casagua, junto con su equipo administrativo.
El IDI, es un sistema de medición del desempeño administrativo expedido por el Departamento de la función Pública, con base en los parámetros establecidos para evaluar el manejo de las entidades territoriales, que le dio a la alcaldía de Neiva un puntaje de 85.2%.
Con este guarismo la administración municipal pasa el examen en componentes claves como el talento humano, la contratación pública, control interno, transparencia y la ejecución presupuestal.
Es una herramienta mediante la cual se garantiza el control y el buen funcionamiento institucional, la eficiencia y la prestación de los servicios a la ciudadanía
Neiva ocupa el séptimo lugar, supera a Santa Marta, Bucaramanga y Cali, tres ciudades de empuje, tradición y liderazgo nacional, inclusive con mejores perspectivas económicas y financieras.
Y no era para menos, las alcaldías que lideran la puntación son: 1º. Bogotá – 97.2 puntos. 2º. Cartagena – 95.4 puntos. 3º. Medellín – 91.1 puntos. 4º. Manizales – 88.3 puntos. 5º. Pereira 86.1 puntos. 6º. Ibagué – 85.2 puntos, y 7º. Neiva con 85.2 puntos
El año anterior Neiva ocupaba el puesto 14 y subió 8 posiciones en un solo año, un avance significativo en términos de eficiencia institucional y fortalecimiento de la gestión pública local.
Esta medición fue hecha entre 6.000 entidades territoriales y del orden nacional, con una minuciosa actividad para medir el desempeño real y concreto.
En materia de seguridad
Por otro lado, es motivo de relativa tranquilidad y satisfacción debido a que Neiva y el Huila avanzaron en asuntos de seguridad, de acuerdo con un bien sustentado último informe entregado por las autoridades, luego de concluidas las festividades
En Neiva, aunque aumentó el número homicidios intencionales por diferentes causas, bajó un 65 por ciento la incidencia de lesiones personales. El hurto a personas bajó un 308%, el hurto a comercio descendió un 22%, no se robaron ni un solo carro y bajó un 85% el robo de motocicletas.
En Colombia, la tasa de criminalidad es alta, especialmente en homicidios, cuya tendencia ha variado en los últimos años. Las causas son la pobreza, la falta de oportunidades, la incursión de grupos armados ilegales y la impunidad que pudo influir en la comisión de delitos.
En el Huila, en términos generales, disminuyó el número de delitos contra la vida, los bienes y los derechos de las personas, especialmente en la temporada festiva.
Hubo menor incidencia comparada con la misma época del año anterior, una reducción del 50% de los homicidios con relación al año anterior, rebajó un 68% el robo de motocicletas, se ejecutaron más de 200 capturas, 29 de estas por orden judicial y se incautaron 28 armas de fuego, pero lo principal de todo, es que ahora se camina con más confianza, pero, claro está, sin descuidarse, para evitar sorpresas.
Es una buena radiografía de la situación que vivimos en Neiva y el Huila y vale la pena destacarla sin ambages, ceñidos al fundamento de las autoridades, sin maquillaje y sin afanes, para generar mayor credibilidad a estos delicados temas, casi siempre, manejados con ciertos intereses y marcada proclividad, de manera especial, en las redes sociales.








