El menor haría parte de las disidencias del frente ‘Darío Gutiérrez’, que afecta el orden público en el departamento del Huila. El perfil delictivo de alias ‘Camilo’ evidencia una reincidencia dentro de las filas del grupo armado.
DIARIO DEL HUILA, Panorama
Por: Francy Villarreal Ruiz
Detalles sobre el perfil delictivo del disidente, un menor de tan solo 17 años de edad conocido con el alias de ‘Camilo’, señalan que, a pesar de haber sido aprehendido en flagrancia durante operativos de las autoridades, ha quedado en libertad luego de que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) restablezca sus derechos.
Las autoridades indicaron que, tras su más reciente aprehensión el pasado 31 de mayo, se adelantó el proceso de restablecimiento de derechos, al ser considerado víctima del conflicto.
Frente a este caso, el coronel Henry Herrera Arenas, comandante de la Novena Brigada del Ejército, entregó detalles sobre la identidad del menor y el papel que cumplía al interior del grupo armado. Además, se refirió al accionar de los grupos ilegales en el reclutamiento de menores para instrumentalizarlos en hechos delictivos.
“Fueron capturados y heridos dos sujetos; uno resultó ser menor de edad, al parecer, pues obviamente se le restablecieron sus derechos, y el otro criminal ya fue presentado por la Fiscalía ante un juez, quien emitió las respectivas órdenes de captura”, informó el coronel Herrera.
¿Quién es el menor de edad?
Según las autoridades, este menor es conocido dentro del grupo delincuencial con el alias ‘Camilo’. Está vinculado a un proceso judicial por lanzar artefactos explosivos contra comerciantes de Neiva en el año 2024.
Igualmente, fue aprehendido por tropas de la Novena Brigada en el municipio de Algeciras, Huila, con seis artefactos explosivos que, según información, serían lanzados en la ciudad de Neiva. En esa ocasión, se movilizaba en compañía de otro sujeto, quien fue capturado y enviado a un centro carcelario.
En ese operativo, a alias ‘Camilo’ se le restablecieron sus derechos. Sin embargo, una vez en libertad, atentó contra la vida de un suboficial y un soldado del Batallón de Alta Montaña Número 9, en la vereda El Paraíso, donde ambos militares resultaron heridos, aunque sin gravedad. Actualmente, los soldados aún se encuentran en proceso de recuperación. La motocicleta en la que se movilizaban quedó completamente fuera de servicio.
Posteriormente, cuando se efectuó la captura de alias ‘El Indio’ y alias ‘El Guajiro’ en la zona rural de Guayabal, alias ‘Camilo’ intimidaba a la población civil para que interviniera y facilitara la liberación de los capturados.
Un nuevo hecho delictivo se sumó a la hoja de vida de alias ‘Camilo’, cuando fue señalado de instrumentalizar a campesinos para evitar que alias ‘El Guajiro’ fuera trasladado a la ciudad de Neiva. “Cuando hicimos la captura de alias ‘El Indio’ o ‘El Guajiro’, en la zona rural de Guayabal, en San Vicente del Caguán, departamento del Caquetá, este criminal estaba intimidando a la población civil para que nos quitaran a este sujeto”, indicó el coronel Herrera Arenas.
El último hecho que se le atribuye en su historial delictivo es el asesinato de una líder en el área rural de Baraya. Durante la acción de las tropas del Ejército, alias ‘Camilo’ resultó herido. No obstante, por ser menor de edad, la justicia lo considera víctima del conflicto y ordena restablecerle sus derechos.
Otros casos
De acuerdo con la Fuerza Pública, en el departamento del Huila se reporta otro caso de un menor de edad que, en la vía que comunica a Oporapa con La Argentina, lanzó una granada de mano contra las tropas. Sin embargo, también le fueron restablecidos sus derechos por su condición de menor.
Posteriormente, indicaron las autoridades que, durante una operación contra alias ‘Sebastián’ en el área rural del municipio de La Plata, este mismo menor fue hallado nuevamente dentro de las filas armadas, portando armamento y participando activamente del grupo ilegal.
“Hago un llamado para que se verifique ese proceso, ese sistema que busca restablecer a estos menores un camino legal ante la sociedad, pero que al parecer ellos no aprovechan”, afirmó el coronel.
Las causas para que estos menores reincidan en su accionar delictivo son múltiples. Se ha identificado que uno de los principales motivos es la búsqueda de una vida que les ofrezca dinero fácil, lo que los lleva a reincorporarse a los grupos disidentes. A esto se suma la sensación de poder que les genera ejecutar acciones violentas ante una comunidad atemorizada, o incluso la existencia de una mente criminal que, en algunos casos, ya no tendría posibilidad de resocialización.
Menores recuperados
En lo que va del año 2025, las autoridades en el Huila han recuperado a más de 18 menores de edad que pertenecían a grupos armados organizados residuales. De ese total, según el coronel Herrera, el único reincidente es alias ‘Camilo’.
Frente al panorama de instrumentalización de menores para la guerra y las acciones delincuenciales, las autoridades indican que continúa el reclutamiento forzado de menores.
“Esto es una práctica criminal que viola claramente los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario, porque criminaliza a nuestros jóvenes campesinos, los convierte en asesinos y les arrebata sus oportunidades de trabajar o estudiar. Repudiamos y rechazamos estos actos criminales por parte de los grupos armados organizados, y les pedimos a estos jóvenes que deserten, que renuncien a estas filas, que no se dejen engañar”, expresó el comandante de la Novena Brigada del Ejército.
¿Qué dice el Gobierno Departamental?
El Gobierno Departamental, en voz del secretario de Gobierno, Juan Carlos Casallas Rivas, indicó que el caso genera preocupación debido a la falta de implementación de medidas de protección eficaces para estos menores recuperados, lo cual facilita que regresen a las filas de estas estructuras criminales.
“En el departamento del Huila lo que ha ocurrido es que estos menores terminan siendo víctimas de estas estructuras criminales, o desafortunadamente, muertos en combate. Esto exige que se diseñen mecanismos de protección mucho más eficaces que impidan que estos menores, que además tienen capacidad de acción contra la Fuerza Pública y la ciudadanía, retornen a esas estructuras”, indicó Casallas.
Se sabe que el menor ya había sido aprehendido transportando explosivos que serían llevados a Neiva, pero aun así seguía participando en la ola de criminalidad.
“Sin duda genera una especial preocupación. Sin embargo, como autoridades y Fuerza Pública, estamos sometidos al imperio de la ley, y esas son las disposiciones que esta establece respecto al tratamiento que se debe otorgar en este tipo de eventos”, agregó el funcionario.
Frente a este caso, se hace urgente implementar medidas de protección y hacer un llamado al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, así como a las autoridades judiciales, para que se establezcan mecanismos eficaces que impidan que estos menores sean nuevamente vinculados a grupos armados o expuestos a perder la vida.
El operativo del Ejército
Al día siguiente del homicidio de la líder social y buscadora Lina María Puentes Vega, el Ejército reportó que tropas frustraron los planes criminales del Bloque Jorge Suárez Briceño en la vereda Nueva Reforma del municipio de Baraya, norte del Huila.
La operación permitió la captura de dos de sus integrantes, luego de combates registrados en la zona.
Durante operaciones en profundidad, las unidades militares sostuvieron un enfrentamiento armado con integrantes de esta estructura criminal, quienes previamente habrían asesinado a la líder social.
Se informó que, en su intento de huida y tras los enfrentamientos, dos integrantes del grupo ilegal resultaron heridos y fueron capturados por las tropas, quienes les brindaron los primeros auxilios, en cumplimiento estricto del respeto a los derechos humanos y al Derecho Internacional Humanitario.
En el desarrollo de la misión, las tropas incautaron un fusil Galil calibre 5.56 milímetros, una pistola 9 milímetros, un revólver calibre 38, 47 cartuchos de diferentes calibres, dos proveedores, una mira, un celular y una motocicleta.
Esta acción militar representa un importante golpe a los planes de fortalecimiento logístico y financiero de dicha estructura armada, cuyos objetivos incluían actividades extorsivas, reclutamiento forzado de menores, constreñimiento y desplazamiento de la población campesina.
