El presidente Gustavo Petro defendió este lunes su decisión de suspender la extradición de Gabriel Yepes Mejía, alias ‘HH’, comandante de Comuneros del Sur, grupo disidente del ELN que participa en un proceso de paz territorial en Nariño. A través de su cuenta de X (antes Twitter), el mandatario afirmó que esta medida se enmarca dentro de lo que permite la ley para procesos de paz avanzados.
“La ley permite zonas de concentración en los procesos más avanzados de paz y suspender extradiciones si se está en uno de ellos. Así se hizo en el pasado y se hará en el presente”, escribió Petro, al referirse tanto a la suspensión de la entrega de Yepes a Estados Unidos como a la creación de zonas de paz en regiones como el Catatumbo.
En el caso de Yepes Mejía, el Gobierno nacional emitió la Resolución 158 del 20 de mayo de 2025, en la que se suspende su extradición bajo la condición de que continúe su participación activa como negociador en la Mesa de Diálogos de Paz y aporte “resultados concretos y verificables” a la consolidación de la Paz Total. El documento advierte que, en caso de interrupción o incumplimiento, se reactivará su entrega al Gobierno estadounidense.
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Avances en dos regiones clave
El jefe de Estado destacó que actualmente hay dos procesos que han alcanzado una fase avanzada: uno con el frente 33 del Estado Mayor Central (EMC) en la región del Catatumbo, y otro con los Comuneros del Sur en Nariño. También mencionó otros esfuerzos en curso, como el proceso con la Coordinadora Nacional Guerrillera y el componente sociojurídico de bandas en Medellín, en espera del acompañamiento de la Fiscalía.
Estrategia política y social
Petro recalcó que su estrategia para avanzar hacia la paz combina lo político, lo militar y lo social. “Hemos utilizado una estrategia político-militar: ganar la población del territorio en conflicto, transformando sus condiciones de vida, defender procesos de negociación serios y atacar a quienes no quieren dejar la violencia”, escribió, en referencia a actores ilegales asociados con carteles extranjeros y minería ilegal.
En sus mensajes, el presidente insistió en que “la paz es posible y es el destino nacional”, y rechazó los intentos por desacreditar los actuales esfuerzos de diálogo. “Sé que hay sectores de la sociedad colombiana que quieren desbaratar estos procesos para demostrar que la paz no es posible”, afirmó.
La decisión sobre Yepes Mejía ha generado debate político, pero el Gobierno sostiene que este tipo de medidas son necesarias para facilitar el avance de procesos que, según el Ejecutivo, deben centrarse en transformar las condiciones de vida de las comunidades históricamente golpeadas por la violencia.
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