Las Fuerzas Militares de Colombia mantienen un operativo de gran escala en la región amazónica del país con el objetivo de dar con el paradero de Néstor Gregorio Vera Fernández, conocido como «Iván Mordisco», principal cabecilla de las disidencias de las Farc.
Según reveló El Tiempo, el líder insurgente estaría herido tras un enfrentamiento en la zona del río Caquetá, que dejó seis de sus hombres muertos. Desde entonces, se ha movilizado de forma constante, acompañado únicamente por un grupo reducido de cinco personas, entre ellos tres mujeres indígenas que conformarían actualmente su círculo de seguridad más cercano.
Uno de los elementos que más ha llamado la atención de las autoridades es la inclusión, en los campamentos abandonados, de objetos vinculados con prácticas esotéricas. Figuras asociadas a rituales de magia negra, mantras y otros artefactos fueron encontrados durante una inspección en Puerto Santander, Amazonas. Estos hallazgos refuerzan una hipótesis en la que el líder guerrillero recurriría a creencias esotéricas para protegerse de su captura, en medio de una creciente vulnerabilidad operativa.
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Adicionalmente, se presume que Iván Mordisco ha buscado el respaldo de líderes espirituales de comunidades indígenas en la frontera sur del país. La inteligencia militar considera que este acercamiento no solo tiene un componente de protección simbólica, sino también estratégico, en tanto algunas comunidades podrían facilitarle movilidad y refugio en áreas de difícil acceso.
El despliegue en la zona del Araracuara, entre los departamentos de Caquetá y Amazonas, ha sido uno de los más exigentes del último año. Más de mil efectivos, apoyados por helicópteros, drones y comandos especiales, han sido movilizados para rastrear cada punto crítico del territorio.
La compleja geografía, sumada a las lluvias persistentes y a la densa vegetación, ha hecho que las operaciones avancen con dificultad, aunque con algunos resultados: en las últimas semanas se han reportado la neutralización de cabecillas como alias «Paisa» o «Duver», así como alias «Pollo Purino», y la captura de cuatro personas más.
El Ministerio de Defensa anunció el aumento de la recompensa por información sobre Iván Mordisco, elevándola a 4.450 millones de pesos, en un intento por incentivar la colaboración incluso dentro de su propio círculo. Las divisiones internas y el descontento de algunos mandos medios estarían facilitando la obtención de datos clave.
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