El cáncer colorrectal, una de las enfermedades más comunes a nivel mundial, está estrechamente vinculado a los hábitos de vida. Oncólogos destacan que factores como la obesidad, el sedentarismo y una dieta poco saludable aumentan significativamente el riesgo de padecerlo.
DIARIO DEL HUILA, SALUD
Cada año se celebra el Día Mundial contra el Cáncer Colorrectal, una fecha clave para reflexionar sobre la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano de esta enfermedad, que constituye uno de los cánceres más comunes en todo el mundo. Según los oncólogos del Grupo de Tratamiento de Tumores Digestivos de España (TTD), el cáncer colorrectal es una de las formas de cáncer más prevenibles, y su aparición está estrechamente vinculada a dos grandes factores: la obesidad y el sedentarismo.
En los últimos años, se ha evidenciado un aumento en la incidencia de este tipo de cáncer, especialmente en países occidentales, y gran parte de esta tendencia se debe a un estilo de vida poco saludable. Los expertos aseguran que, además de la obesidad y la falta de actividad física, otros factores como una dieta pobre en frutas y verduras, el consumo excesivo de alimentos procesados y el consumo de alcohol o tabaco, aumentan considerablemente el riesgo de desarrollar tumores colorrectales.
Un Estilo de Vida Saludable como Clave para la Prevención
Los oncólogos coinciden en que un estilo de vida saludable es fundamental para reducir el riesgo de padecer cáncer colorrectal. Mantener un peso adecuado desde una edad temprana, realizar ejercicio físico regularmente y seguir una dieta equilibrada, rica en alimentos frescos y bajos en calorías, puede tener un impacto significativo en la prevención de la enfermedad. «El cáncer colorrectal es muy prevenible. Está muy relacionado con hábitos de vida, como la dieta, el ejercicio físico, la obesidad y el tabaco», afirma Fernando Rivera, presidente del Grupo TTD y jefe de Oncología Médica del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander.
Puede leer: Falta de rigor en la UPC pone en jaque al sistema de salud colombiano

Además, la jefa del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario de Navarra y vicepresidenta del TTD, Ruth Vera, destaca que mantener un estilo de vida saludable puede prevenir hasta un 40% de los tumores. «Solo el hábito tabáquico es responsable de más del 30% de los cánceres, y factores como el alcohol, el sobrepeso y el sedentarismo también tienen un impacto claro y directo», afirma Vera. La prevención temprana, según los especialistas, debe comenzar desde la niñez, cuando los hábitos saludables pueden ser incorporados de manera más eficaz en el día a día.
La Actividad Física como Pilar Fundamental
En este sentido, uno de los pilares en la prevención del cáncer colorrectal es la actividad física. La oncóloga médica del Hospital Universitario Vall d’Hebron de Barcelona y miembro del TTD, Elena Élez, subraya la importancia de adoptar hábitos saludables no solo para la prevención del cáncer, sino también para mejorar la calidad de vida de los pacientes diagnosticados. «Los pacientes que mantienen un estilo de vida saludable no solo tienen una mejor capacidad para afrontar el tratamiento, sino que también experimentan un aumento en su bienestar psicológico y en su resiliencia», indica Élez.
Un estudio realizado con cerca de 18,000 pacientes reveló que aquellos que habían recibido asesoramiento sobre actividad física tras el diagnóstico de cáncer colorrectal mostraban niveles más altos de actividad física. Sin embargo, menos de un tercio de los pacientes reportaron haber recibido dicho consejo. Este dato resalta la necesidad urgente de que los profesionales sanitarios incluyan el ejercicio físico en los tratamientos de cáncer colorrectal, como una herramienta esencial para mejorar los resultados en los pacientes.
Beneficios Comprobados de la Actividad Física
De acuerdo con los estudios, mantenerse físicamente activo antes y después del diagnóstico de cáncer colorrectal está asociado con una mejor supervivencia. Los oncólogos destacan que en cánceres como el de mama y el colorrectal, los pacientes que aumentan su actividad física tras el diagnóstico reducen de manera considerable su tasa de mortalidad. Este hallazgo subraya la relevancia de incorporar pautas de actividad física en los programas de atención oncológica a nivel mundial.
«Las recomendaciones de los oncólogos sobre dieta, ejercicio y evitar la obesidad son claves para modificar hábitos y generar un impacto positivo en la salud de los pacientes», añaden desde el TTD.
Diagnóstico Precoz: Una Herramienta Crucial
Además de la adopción de hábitos saludables, el diagnóstico precoz sigue siendo una herramienta fundamental en la lucha contra el cáncer colorrectal. Los especialistas coinciden en que los programas de detección de cáncer son cruciales para identificar lesiones premalignas y detectar la enfermedad en etapas tempranas, lo que incrementa las posibilidades de curación. Por ello, estar alerta a ciertos signos de advertencia, como sangre en las heces, deposiciones anormales, dolor abdominal persistente, pérdida de peso inexplicable o cansancio excesivo, puede marcar una diferencia significativa en el pronóstico del paciente.

Puede leer: Bill Gates revela las carreras con más futuro









