Una alimentación equilibrada y un estilo de vida saludable son fundamentales para prevenir las enfermedades cardiovasculares. Así lo destaca la Sociedad Española de Ateroesclerosis en su nueva guía, donde brinda recomendaciones clave para reducir los factores de riesgo y mejorar la salud del corazón.
DIARIO DEL HUILA, SALUD
Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo una de las principales causas de mortalidad en el mundo, y su prevención requiere algo más que avances científicos y tecnológicos. Según la Sociedad Española de Ateroesclerosis (SEA), la base para reducir los factores de riesgo radica en la adopción de un estilo de vida saludable y una dieta equilibrada. Así lo expone la guía de alimentación presentada este 13 de marzo, la cual brinda recomendaciones clave para mejorar la salud del corazón.
El papel esencial de la dieta en la salud cardiovascular
Uno de los principales enfoques de la guía es la importancia de consumir cinco raciones diarias de frutas y verduras, preferiblemente de temporada y proximidad, no solo por sus beneficios nutricionales sino también por su menor impacto ambiental.
Las papas pueden incluirse en la dieta hasta tres veces por semana, combinadas con verduras, carnes o pescados. En cuanto a los cereales refinados, aunque han sido objeto de debate por su impacto en el índice glucémico, su consumo es recomendable si se combinan con otros alimentos que ralenticen su absorción.
Los frutos secos, consumidos al menos tres veces por semana en porciones de 30 gramos (aproximadamente un puñado), son una excelente fuente de grasas saludables y proteínas. Asimismo, el pescado y los mariscos, ricos en ácidos grasos esenciales, deben consumirse hasta tres veces por semana, con un mínimo de dos raciones de pescado azul, sustituyendo la carne en algunas comidas.
Lácteos, cacao y café: aliados en la dieta
El consumo de dos raciones diarias de lácteos, ya sean desnatados o enteros, es recomendado, siempre evitando aquellos con azúcares añadidos. Sorprendentemente, los zumos de frutas sin azúcar han sido reivindicados como no perjudiciales.
El cacao, si tiene al menos un 70 % de pureza, es beneficioso en cantidades de hasta 30 gramos diarios. Del mismo modo, el café ha demostrado ser seguro en cantidades de hasta cinco tazas diarias, siempre que se consuma sin azúcar.
Los huevos y las legumbres, fuentes de nutrientes clave
Aunque el huevo ha sido objeto de controversia por su contenido de colesterol, la guía aclara que su consumo, incluso frito en aceite, no aumenta el riesgo cardiovascular. Se trata, además, de una fuente de proteínas y nutrientes esenciales.
Las legumbres, como los garbanzos y las lentejas, son altamente beneficiosas para la salud cardiovascular y deben consumirse entre dos y tres veces por semana.
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Carnes y ultraprocesados: lo que se debe evitar
La carne puede formar parte de una dieta equilibrada hasta cuatro veces por semana, priorizando la carne blanca sobre la roja y eliminando la mayor cantidad de grasa posible. Sin embargo, el consumo de embutidos y ultraprocesados está totalmente desaconsejado.
Las carnes vegetales, aunque se presentan como una alternativa, también son consideradas productos procesados y, según los expertos, aún no se pueden catalogar como saludables.
Reducir la sal y evitar el alcohol y las bebidas azucaradas
El consumo excesivo de sal es uno de los mayores factores de riesgo cardiovascular, por lo que se recomienda limitar su ingesta a cinco gramos diarios. Para realzar el sabor de los alimentos, la guía sugiere sustituir la sal por alternativas naturales como el jugo de limón, hierbas aromáticas, especias o ajo.
Por otro lado, el consumo de alcohol sigue siendo desaconsejado por sus efectos negativos en la salud. Sin embargo, las bebidas fermentadas como la cerveza o el vino son consideradas las menos perjudiciales, aunque el mensaje final sigue siendo que el mejor consumo es cero.
Las bebidas azucaradas también se encuentran en la lista de los productos desaconsejados, ya que aumentan el riesgo de obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares. Sustituirlas por versiones sin azúcar tampoco es la mejor opción, pues los edulcorantes artificiales también se han vinculado con mayores riesgos para la salud.
Un compromiso con la salud
Esta guía de la SEA refuerza la importancia de una alimentación saludable y un estilo de vida activo para la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Si bien los avances médicos juegan un papel fundamental, la verdadera clave está en la educación y la concienciación de la población sobre los hábitos diarios que pueden marcar la diferencia en la salud del corazón.










