ALFREDO VARGAS ORTIZ
Orgullosamente Abogado y Docente Universidad Surcolombiana
Doctor en Derecho Universidad Surcolombiana
La reciente visita del ministro de Educación, José Daniel Rojas Medellín, dejó en evidencia la voluntad del Gobierno Nacional de crear la Universidad del Café, una iniciativa que merece toda la atención del gobierno departamental y los gobiernos municipales. Somos, indiscutiblemente, los principales productores de café en Colombia, con 87 mil familias que dependen de este producto, una población cercana a las 350 mil personas y presencia en 30 de los 32 municipios del departamento del Huila.
A nuestro juicio, distintos actores sociales e institucionales deben ser copartícipes de esta importante iniciativa. La Universidad Surcolombiana, con su capacidad instalada en la Facultad de Ingeniería, sus laboratorios de suelos y el Centro Surcolombiano de Investigación en Café (CESURCAFÉ) —un centro público dedicado a la investigación, desarrollo y tecnología en respuesta a los desafíos de la producción y comercialización del café en la región surcolombiana—, tiene un papel clave en este proyecto. Asimismo, la Facultad de Economía y Administración, con su Centro de Emprendimiento y sus diversos programas de pregrado, posgrado y cursos de profundización en comercialización de productos, calidad e internacionalización, puede aportar significativamente.
También deben sumarse a esta iniciativa la Escuela Nacional de la Calidad del Café en Pitalito, liderada por el SENA, que recientemente recibió una certificación internacional tras la auditoría de la Specialty Coffee Association (SCA) por su excelencia en la formación del sector cafetero. Esto le permitió ingresar a la red mundial de Premier Training Campus SCA.
El Comité de Cafeteros del Huila, y a nivel nacional, cuenta con capacidades técnicas y logísticas para materializar esta idea. Asimismo, las Casas del Café y las escuelas del café en municipios como Algeciras, Gigante, San Adolfo, Pitalito, La Plata y Acevedo, junto con las fincas de su propiedad, podrían convertirse en espacios fundamentales para la práctica de los aprendices.
La Universidad del Café debe ofrecer formación a nivel técnico, tecnológico, de pregrado y posgrado en áreas como Agronegocios Cafeteros, Mercadeo, Barismo, Bilingüismo, Cátedra del Café y Procesos Industriales para el Valor Agregado del Café. Sería una gran oportunidad que la Universidad Surcolombiana creara un programa de Agronomía, «el médico de las plantas», para contribuir al mejoramiento de la calidad del cultivo y al tratamiento de sus enfermedades.
La propuesta de mejorar el Colegio Nacional Santa Librada para materializar la Universidad del Café es maravillosa, pero debe implicar que la universidad lidere el proceso con sus recursos acumulados —centros de investigación y proyectos en desarrollo sobre el café—, creando programas técnicos y tecnológicos, e incluso pregrados y posgrados, que permitan mejorar el sector de manera práctica. Esto debería articularse a través de ciclos propedéuticos, aprovechando también las sedes que la Universidad Surcolombiana tiene en Pitalito, Garzón y La Plata.
¡Es momento de hacer de la Universidad del Café una realidad para el desarrollo de nuestro territorio y la consolidación de la cultura cafetera en el Huila!
