Nicolás Petro, reafirmó su inocencia tras no aceptar los cargos imputados por la Fiscalía en su contra por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
En una audiencia ante el juez Segundo Especializado del Circuito de Barranquilla, Petro Burgos declaró: «No acepto, soy inocente», sentando su postura frente a las acusaciones que, según él, enfrentará en juicio.
El proceso judicial se centra en presuntas irregularidades relacionadas con la recepción de 1.053 millones de pesos que, según la Fiscalía, habrían sido destinados a la campaña presidencial de su padre. Aunque Nicolás Petro reconoció inicialmente algunos elementos durante su tiempo en prisión domiciliaria, desestimó tales señalamientos al recuperar su libertad y refugiarse en Barranquilla, donde permanece en detención preventiva.
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Durante la diligencia, la defensa del exdiputado, liderada por el abogado Alejandro Carranza, argumentó la presencia de testigos para la siguiente etapa del proceso que enfrenta Petro Burgos. Entre ellos a Ricardo Roa, actual presidente de Ecopetrol, y Máximo Noriega, exaspirante a la Gobernación del Atlántico y señalado como posible intermediario en la supuesta entrega de recursos ilícitos.
Mientras tanto, la Fiscalía insiste en que las pruebas reunidas evidencian una conducta delictiva, solicitando al juez que estas sean admitidas para el desarrollo del juicio. El caso ha generado gran expectativa, no solo por su implicación legal, sino también por el impacto político.
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