El dengue y la delincuencia, tienen‘azotado’ al barrio Efraín Rojas Trujillo

Un llamado realizó la ciudadanía a la Alcaldía de Neiva para que gestione recursos para el arreglo de la caseta comunal del sector, que se encuentra en franco deterioro, incluso dijo una residente de la zona, llueve más adentro que afuera, y precisamente la acumulación de agua en el lugar, permite que se procreen roedores y el zancudo Aedes aegypti, e incluso ya varias personas han padecido dengue.

Otra de las peticiones, esta vez elevada a la Secretaría de Movilidad, es la instalación de al menos tres reductores de velocidad, ya que en la carrera 1G, se registran accidentes de tránsito y por esta zona transitan personas de la tercera edad.

Ahora, de dos lotes de engorde que se encuentran en el sector, ya han salido roedores, culebras hacía las casas ubicadas en la calle 23, causando pánico en los ciudadanos.

Atracadores los asechan

Y en relación a la inseguridad, varios miembros de la comunidad del barrio Efraín Rojas Trujillo, señalaron que vienen siendo afectados por delincuentes quienes, en moto y con armas de fuego, les hurtan sus pertenencias personales.

De manera reciente, unos comerciantes que venden frutas en un carro, fueron víctimas de los malhechores, quienes los intimidaron y con armas les robaron los celulares y el dinero del producido. Igual ‘suerte’ corrieron los operarios de un montallantas que funciona en el sector.

Y, una señora que se encontraba cerca de una panadería, también fue abordada por los delincuentes, quienes le pedían el celular y debido a que tal vez por temor, no lo entregó rápido, recibió una puñalada en una de sus manos.

Ahora, los residentes del sector, indicaron que no se ve a las patrullas de la Policía transitar por estos barrios, lo que facilitaría el accionar de los delincuentes y que cuando llaman al Cai más cercano, en este caso el ubicado en el Parque Leesburg, ni les contestan. Así que un llamado a las autoridades para que no dejen sola a la ciudadanía.

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Parecen no tener dueño

Por otra parte, Herlinda Ortiz, presidenta de la junta de acción comunal del barrio Efraín Rojas Trujillo, manifestó: “llevó más de ocho años solicitando que le pongan orden a dos lotes de ‘engorde’ del sector, que pertenecen al Instituto Financiero para el Desarrollo del Huila (INFIHUILA), y a la fecha no ha sido posible, además, ahí uno encuentra roedores, también zancudos. Se convirtieron en botadero de residuos sólidos y escombros”.

“Los predios no se encuentran encerrados, así esta consignado en el Plan de Ordenamiento Territorial, que los predios de ‘engorde’, deben tener seguridad. Por este motivo le solicitamos a la institucionalidad que se responsabilicen de esos lotes, porque incluso ya hay personas quienes han querido invadirlos”, reveló la líder.

La mujer aseguró que ha colocado derechos de petición, y los gerentes de las anteriores administraciones, siempre le indicaban que iban a arreglar la situación y ninguno cumplió.

Cansados de esta situación, piden que se los den a la comunidad, o los vendan, lo importante, indican los residentes es que les quiten ese problema. Los predios se encuentran con abundante maleza.

Asimismo, la presidenta, indicó que le solicita de nuevo a Germán Darío Sánchez, secretario de Infraestructura de Neiva, que suministre la maquinaría necesaria para limpiar los residuos que se encuentran en estos predios, que se convirtieron en escombreras.

Estos lotes se encuentran ubicados en la carrera 2 con calle 22 y el otro en la carrera 1 H con calle 22.

‘Droga’ e inseguridad

A los lotes llegan consumidores de sustancias alucinógenas y la gente se siente insegura con su presencia, temen ser víctimas de robos.

Asimismo, una afectada manifestó que el predio ubicado cerca de la carrera segunda, había dos sujetos que aprovechando la oscuridad, salían con cuchillo e intimidaban a sus víctimas para quedarse con sus pertenencias, luego, ingresaban de nuevo al predio que en ese momento se encontraba con presencia de plantas, facilitando su escape.

Incluso allí existían unas estructuras de ladrillos a la que iban sujetos a consumir estupefacientes.

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Reductores de velocidad

Igualmente, otras de las solicitudes de la representante de la comunidad es la edificación o colocación de reductores de velocidad, “en la carrera 1G, porque en este sector es alto el índice de accidentalidad, y con los mismos esperamos mitigar la siniestralidad que se presenta”, indicó Herlinda Ortiz.

Además, sirven para salvaguardar la integridad de los adultos mayores que asisten al Centro Vida, ya que principalmente los conductores de moto, transitan a alta velocidad y en ocasiones realizan maniobras peligrosas, colocando en riesgo la integridad de los demás actores viales.

Por este motivo, la líder indicó que este hecho ya ha sido puesto en conocimiento de la Secretaría de Movilidad.

Los zancudos los enferman

Otra problemática que los afecta es la proliferación de insectos, al respecto, Miriam Muñoz, residente del sector, señaló: “mire vivo cerca de la caseta comunal del barrio y estamos preocupados porque en ese lugar está bastante dañado, el techo roto, mejor dicho, llueve más adentro que afuera, y al ingresar el agua, hace que se convierta en criadero de zancudos, incluso hasta roedores salen hacia las casas de los vecinos”.

Ya hace tiempo vienen sufriendo por esta situación, incluso ya en una oportunidad entre los vecinos recolectaron dinero y contrataron a una empresa para que fumigara el lugar.

“Esa vez a los niños les dio dengue, producido por los insectos que se encuentran en esa casa, este es un problema que tenemos los residentes de la carrera 1G Bis, tenemos con ese sitio, por eso le pedimos a la Alcaldía que la arregle para el disfrute de la comunidad”, indicó la vocera.

Primer deceso confirmado

Hay que recordar que en el segundo semestre en Neiva, falleció un menor por dengue, en relación a este hecho, Lilibeth Galván, médica y secretaria de Salud de Neiva, señaló en su momento: “seguimos frente a un brote tipo 1, en el encontramos que en Neiva, hemos tenido 6.853 casos reportados con corte a la semana epidemiológica número 40, de estos hechos continuamos con el mismo número de episodios graves. Desafortunadamente, uno de estos pacientes con esta patología, perdió la vida, es el primer caso de muerte que se registra en la ciudad. El menor tuvo una complicación neurológica, y también tenía otras enfermedades”.

Esta situación fue confirmada por el Instituto Nacional de Salud.

“El anterior caso nos lleva a insistir, que lo más importante son las medidas preventivas. El cambio climático trae consigo, un aumento de estas enfermedades transmitidas por vectores, porque se presentan lluvias, luego calor extremo y esto hace que el agua de las albercas, sea un ambiente cálido para la proliferación del vector, por ende, el llamado es a lavarlas cada cinco días, porque donde hay zancudos, existen criaderos”, agregó la administrativa.

En este orden de ideas, se debe revisar el jardín, recipientes que pueden acumular agua, llantas entre otros y eliminarlos.