Un avión Embraer 190 de la aerolínea Azerbaijan Airlines se estrelló este miércoles cerca de la ciudad de Aktau, en el oeste de Kazajistán, dejando un saldo trágico de 39 fallecidos y 28 sobrevivientes, según informaron las autoridades locales.
La aeronave cubría la ruta entre Bakú, capital de Azerbaiyán, y Grozni, en el sur de Rusia. Durante el vuelo, los pilotos solicitaron un aterrizaje de emergencia en la ciudad rusa de Majachkalá, en la región de Daguestán. Sin embargo, la densa niebla obligó al desvío hacia Aktau, donde ocurrió el accidente.
A bordo del avión viajaban 67 personas, incluyendo la tripulación. Según el Ministerio de Transporte de Kazajistán, el impacto dejó un saldo mortal significativo, pero milagrosamente 28 personas lograron sobrevivir, aunque muchas presentan lesiones graves. Varios de los heridos fueron hospitalizados de inmediato, según el Ministerio de Sanidad kazajo.
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Las investigaciones iniciales señalan dos posibles causas para el siniestro:
Una explosión de un balón de oxígeno a bordo de la aeronave.
Un posible choque con una bandada de pájaros, según las declaraciones de Azerbaijan Airlines.
Ambas hipótesis están siendo evaluadas por expertos aeronáuticos y las autoridades correspondientes, quienes han comenzado el análisis de las cajas negras del avión.
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