En el marco de su visita oficial a México, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció la decisión de vender las residencias oficiales de los embajadores en México, Suiza y Bruselas.
La medida, según explicó el mandatario, busca priorizar y ampliar los espacios destinados a la atención de los colombianos en embajadas y consulados, donde actualmente se presentan limitaciones significativas.
Durante su encuentro con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, Petro calificó estas propiedades como “casas ostentosas” y criticó el uso que se les ha dado durante años. “Aquí se demuestra el carácter aristocrático y sin sentido de servicio a la ciudadanía en que transformaron a la Cancillería por décadas”, señaló el jefe de Estado a través de su cuenta en la red social X.
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El mandatario afirmó que las residencias de los embajadores suelen ser más amplias y lujosas que las propias sedes diplomáticas y consulares, lo que afecta la calidad de la atención a la ciudadanía. “He visto residencias de embajadores más amplias y palaciegas que nuestras embajadas y consulados, reducidas y sin atención apropiada a la colombianidad. Las casas/palacios de residencias en Suiza, México y Bruselas deben ser vendidas para ampliar los espacios de las embajadas y consulados”, enfatizó el presidente.
La visita oficial también le permitió a Petro constatar personalmente las dificultades de espacio en el consulado colombiano en México, donde la alta demanda de servicios contrasta con la insuficiencia de infraestructura.
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