El nombramiento de Daniel Mendoza Leal como embajador de Colombia en Tailandia ha encendido las alarmas en el Congreso, generando una reacción contundente. Por ello, congresistas presentaron una moción de censura contra el canciller Luis Gilberto Murillo.
La iniciativa, respaldada por congresistas de diferentes partidos, cuestiona no solo la idoneidad del designado, sino también la gestión del jefe de la diplomacia colombiana.
Un nombramiento que no cayó bien
La controversia surgió luego de que Mendoza, conocido por su papel como creador de la serie Matarife, fuera propuesto para el cargo. Legisladores han señalado que los comentarios publicados por Mendoza en sus redes sociales en el pasado, considerados violentos, misóginos y una apología a la violencia de género, lo descalifican para representar a Colombia en el exterior.
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La congresista Katherine Miranda, del Partido Verde, fue contundente en sus críticas. «Yo no sé qué es más asqueroso, si los trinos de Daniel Mendoza o la defensa baja, ruin, mezquina y sucia del presidente Gustavo Petro. Amor le llama a esos trinos. Este mal gobierno no tiene dignidad, sino misoginia, machismo y violencia de género. Por eso acompañaremos esta moción de censura», declaró.
Aunque el presidente Gustavo Petro ha defendido el nombramiento de Mendoza en al menos dos ocasiones, calificándolo como un acto de reconciliación, su postura ha generado divisiones incluso dentro del Gobierno.
Desde la Cámara de Representantes, la situación ha escalado rápidamente. Este viernes, llegó a la presidencia de la corporación la proposición formal para realizar un debate de moción de censura contra el canciller Murillo. Según el documento, el manejo de este nombramiento constituye una “falta a las funciones propias del cargo ministerial”.
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